Estudiantes 1 (4) - Centro Español 1 (2): Con la cabeza en el clásico, el Pincha se durmió, sufrió y terminó festejando en los penales

A cinco días de afrontar el Clásico de Tres de Febrero, Estudiantes hizo su estreno en esta edición de la Copa Argentina ante Centro Español y en el estadio Ciudad de Caseros. Lejos del equipo que viene firme y contundente en el campeonato de la Primera B, el mix entre titulares y suplentes que presentó Fabián Nardozza nunca dio más de tres pases seguidos y logró el pase a la siguiente ronda de la copa por penales, luego de lograr un agónico empate 1 a 1 en el minuto 92 de partido.

El Pincha debutó en la Copa Argentina pensando más en almagro que en el compromiso ante los Gallegos. Aunque hubo mayoría de jugadores que habitualmente no tienen tantas posibilidades, las presencias de los titulares Cristian Tavio, Gastón Montero, Jonathan Soria y Cristian Yassogna reforzaron a un once que tuvo otros jugadores de buen pie como Juan Sosa y Esteban Alegre. Así y todo, el dueño de casa no intentó casi en ningún momento jugar por abajo y apostó al pelotazo sin sentido durante gran parte del encuentro. En ese contexto, con el correr de los minutos el panorama comenzó a tornarse favorable para la visita que, proveniente de la Primera D, llegó a Caseros en busca del batacazo y estuvo a un par de minutos de conseguirlo. Es que si durante la primera parte el local se colgó pensando ya en el clásico del martes, en el complemento la siesta fue todavía más profunda. Por eso, Centro Español aprovechó la pasividad del Matador, se empezó a animar y a poco más de diez minutos para el final gritó el 0-1 por medio de Jonathan Herrera, que definió sin problemas ante el achique de Julio Salvá. Parecía irreversible, y más por la actitud colectiva que evidenciaba que el golpe por el tanto del contrario se había sentido fuerte. A esto había que sumarle que ya no estaban en cancha ni Sosa ni Facundo Bazán (se hizo echar al tirar una patada de atrás). Pero el Pincha fue en los minutos finales obligado y empujado por su gente, que a grito pelado exigía revertir el resultado. Y de tantas pelotas sin sentido que volaron por el campo rival, a los 92' le cayó una justo en la cabeza al ingresado Cristian Gutiérrez (el canterano de Almirante), que aunque no la conectó con gran potencia, lo hizo con el suficiente efecto para que el arquero de Español calculara mal y se le metiera para el 1-1 sobre la hora. Motivado por la igualdad agónica, Estudiantes afrontó la tómbola de los penales con ganas de cerrar la tarde de la mejor manera tras sufrir innecesariamente hasta el silbatazo final. En la definición desde los doce pasos, Salvá se tomó revancha y le atajó a Herrera, mientras que Gonzalo Bravo la tiró por arriba del travesaño. Para el Pincha convirtieron todos menos Soria, pero la clasificación ya no corrió peligro. Durmió, sufrió y terminó festejando el Matador porque viene derecho, porque la diferencia de categoría en algún momento tenía que pesar y porque ya piensa en el clásico... CASEROS PINCHA