El martes por la tarde, el vicepresidente del Club, Francisco Paoletti, presentó en la AFA una carta a través de la cual el Club solicita al Tribunal de Disciplina que revea la sanción aplicada a Damián Ponce en octubre del año pasado, en la que le dieron un año de suspensión por una supuesta agresión al árbitro Diego Muñoz, cuando terminaba el partido en el que Central Ballester perdía (y terminó perdiendo) 2 a 0 contra Juventud Unida.
El confuso episodio sucedió a los 46’ del ST, cuando Muñoz había cobrado un tiro libre a favor del Canalla; y cuando se estaba formando la barrera, el árbitro se acercó a Ponce y allí, según denunció el jugador, hubo una acusación discriminatoria hacia él y por eso reaccionó, aunque no llegó a golpear al juez.
A fin de año, Diego Muñoz, junto a Delfín Benítez y dos líneas (Camilo Brusca y Roberto Cruces) fue desafectado de la designación de árbitros para este 2009 por “motivos técnicos” y además por la sospecha de “darle una mano” a Berazategui a ascender a la “C”.
Este fue uno de los argumentos de la dirigencia Canalla ante el Tribunal de Disciplina. Además se hizo explícito que Ponce, a pesar de estar sancionado, está concurriendo a los entrenamientos y que el fútbol es una ayuda en su vida.
PRENSA BALLESTER
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