JUAN PABLO ROCHI LA QUIERE PROTEGER FRENTE A LA CARGA DE GANDARILLAS, EN UN AVANCE DE ALMIRANTE.
ALTE. BROWN 1 - 0 DEF. DE BELGRANO novena fecha PRIMERA B
Con gol de Bazán Vera superó a Defensores y quedó a uno del líder
Almirante Brown comprobó que buen negocio es seguir buscando. Después de un primer tiempo equilibrado, fue ostensiblemente superior en el complemento, terminó venciendo a Defensores de Belgrano (12 puntos) con un gol de un hijo dilecto de la casa: Daniel Bazán Vera y quedó solamente a una unidad de Tristán Suárez, el único puntero. El final fue tumultuoso, con protestas de los jugadores de Defensores al árbitro.
Seguramente Almirante, cuando se fue a los vestuarios, habrá seguido lamentándose aquella oportunidad que el Indio Bazán Vera desperdició tres veces seguidas. Pero lo cierto, es que no hubo grandes diferencias entre ambos equipos es más, lejos de asumir un rol de partenaire, Defensores de Belgrano incomodó al Mirasol. En el comienzo, pareció que todo iba a ser de Brown, a partir de la movilidad de Marrone y la velocidad de Maraschi. Es más, antes del minuto de juego, tuvo una chance, por Zacaría, desde la izquierda, pero el volante se cayó justo cuando iba a enfrentar a Sanzotti.
Pero los de Núñez empezaron a complicar, fundamentalmente a través de Nadal, que por momentos se tornó una pesadilla para la defensa local -está claro que todavía la falta aceitar el movimiento y que el colombiano Palacios sufrió bastante- y así, primero Monasterio -que estuvo lejos de brindar seguridad- se lo tapó a Conocchiari, luego, una personal de Nadal, no prosperó por poco y por último, Villalba, con una pelota parada que se fue muy cerca del poste derecho, estuvieron cerca de poner al equipo del Gato Daniele arriba del marcador.
Parecía que Almirante había extraviado su fútbol. Defensores le tapó todos los caminos. Pero sobre el final, Maraschi arrancó en velocidad, Bazán Vera hizo la diagonal, el delantero abrió a Bustos, este tocó con el Indio que tiró, Sanzotti tapó, el arquero también se quedó con el rebote y cuando le volvió a quedar, Bazán Vera sacó un remate cruzado que se fue muy cerca del poste derecho. Fue el telón de un primer tiempo movido, interesante, que tuvo un ritmo que no se reflejó en las cifras.
Lo único que se reavivó, en el segundo tiempo, fue el fuego de Brown. Sobre él recayó todo el peso del partido. De todas formas, la única manera que encontró de llegar, fueron los remates de media distancia, ya que le era prácticamente imposible perforar esa defensa. Cuando pisó el área el remate de Zacaría -Bustos lo buscó de manera impecable- fue al cuerpo del arquero. Pero cuando el Dragón reapareció en el partido -fue por intermedio del recién ingresado Marzoratti- Monasterio la tuvo que enviar al corner con una mano. A pesar de ello, estaba claro que el protagonista principal fue el conjunto de Giunta y otra vez apareció Sanzotti, esta vez tapándoselo a Ferrer. Y cuando el uno no pudo, fue Bocca el que mandó la pelota al corner. Pero apareció el eterno Bazán Vera, pisando la media hora, para meter un cabezazo perfecto ante ese centro preciso de Maraschi. Enseguida un tiro de Pipi García, recién ingresado, reventó el travesaño. La alegría se quedó en Casanova.
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